Productores latinoamericanos de banano exigen valor real del producto – El Nuevo Diario (República Dominicana)
Fotografía de bananas de Ecuador en la feria Fruit Attraction 2024, en IFEMA, Madrid (España). EFE/ Patricia Cotelo Bertaiola
EL NUEVO DIARIO, ECUADOR.-Europa es el continente que más consume banano en el mundo, con un promedio de 14 kilos por persona al año, y su mayor proveedor es Latinoamérica, cuyos principales productores denuncian que en los supermercados europeos hay una guerra de descuentos que no respeta el precio justo del producto.
«Lo venden por debajo de su valor real», aseguran, sin que eso refleje sus esfuerzos por cumplir normativas, lograr certificaciones y pagar salarios dignos.
Recientemente, la Fuerza de Tarea Conjunta de Latinoamérica, que integran los gremios exportadores de banano de Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Perú y República Dominicana, denunció que la cadena de supermercados alemana Lidl vendía banano de origen latinoamericano a 0,89 euros por kilo, casi un euro por debajo de sus competidores.
Otros supermercados europeos también lo venden actualmente a 0,99 euros por kilo, con una rebaja del 32 % respecto a su precio habitual de 1,47 euros por kilo.
Para José Antonio Hidalgo, director ejecutivo de la Asociación de Exportadores de Banano del Ecuador (Aebe), el primer exportador mundial de este fruto, este tipo de ofertas no reflejan los esfuerzos de la industria para llevar un producto de calidad a Europa que cumpla con todas las regulaciones. «Nos genera mucha preocupación, porque nuestro banano ha perdido un 20 % de su valor en los últimos quince años», advirtió Hidalgo.
«Esa estrategia, al final del día no es sostenible porque nunca vas a terminar un círculo vicioso de precios bajos», señaló el representante de Aebe al apuntar que así no se podrá mejorar las condiciones de la cadena valor del banano.
Comercio justo como referencia
Hidalgo abogó por involucrar las autoridades europeas, las certificadoras y los supermercados, para que el consumidor entienda que las nuevas reglamentaciones y exigencias de la Unión Europea (UE), como la Ley de debida diligencia, el pacto verde y la estrategia «De la granja a la mesa», tienen un coste. «No podemos tener un pacto verde con números rojos», sentenció.
«Soy consciente de que el consumidor europeo lo va a entender si se le explica bien que tiene que pagar un poco más para generar una sostenibilidad en toda la cadena», apuntó Hidalgo durante la celebración del vigésimo primera edición del «Banana Time», la mayor convención internacional de la industria bananera, que Aebe organiza anualmente en Guayaquil (Ecuador).
El director ejecutivo de Aebe señaló que «la referencia para la negociación en Europa a nivel de los supermercados tiene que ser la metodología de comercio justo o «fair trade», que calcula la estructura de los costes de producción en cada país.
En Ecuador, el precio mínimo fijado a nivel nacional para la caja de 18,14 kilos es de 6,85 dólares y está previsto que sea de 7,25 dólares en 2025.
Banano con salarios dignos
Hidalgo enfatizó que el banano ecuatoriano cumple con todos los requerimientos, normativas y derechos laborales, al contar con once sellos y pasar cada productor por 29 días al año de auditorías.
Detalló que el salario promedio es de 562,50 dólares, por encima de los 483 dólares que calculó la Coalición de Salarios Dignos en torno al manejo de la Ley de debida diligencia de la UE.
«Somos un país que tiene un banano que va con salario digno a la UE. Estamos en pleno cumplimiento», enfatizó Hidalgo, al anotar que el 55 % de la estructura de coste de una caja de banano es mano de obra.
Con más de 3,500 millones de dólares en exportaciones en 2023, la UE y Rusia concentran más de la mitad de las exportaciones de banano ecuatoriano, por lo que ocurra en esos mercados impacta en la economía de Ecuador.
«Somos los que tenemos mayor impacto social, porque a diferencia de los demás países que producen banano, nosotros tenemos 5,400 productores, de los que cerca de 3,400 son pequeños, son economías familiares a los que cualquier cambio afecta a su economía y familia», concluyó Hidalgo.
Relacionado